El sacerdote argentino en Gaza dijo que la zona «está triturada» y pidió «convencer al mundo de que esta guerra tiene que terminar»

- «Millones de personas viven una vida invivible en Gaza», alertó el religioso.
- Dijo que queda un joven herido hospitalizado en estado delicado.
- También agradeció los llamados de apoyo, entre ellos el del Papa, y dijo que no pudo abrir el teléfono después de un día por lo «caliente que estaba» el aparato.